ESPERAR EN DIOS

Para pensar hoy: aprender a esperar es bueno. Esperar en el tiempo…esperar en su kairos.  Esperar en sus promesas.

Lectura: Romanos 4.18-25

Meditar: cuando tratamos las cosas cotidianas con impaciencia, parece que todo toma cierta lentitud. Todo se vuelve más lento. Y solo nos queda que aprendamos a esperar.  A través de la experiencia, aprendemos, que es bueno esperar, cuando esperamos en Dios. (Lamentaciones 3.26)

Así como cuando nos lastiman y nos dejan una herida; solo el Señor es quien las sana, El es  quien sana nuestras heridas. Algunas tardan en cicatrizarse.

 El Señor se toma su tiempo, trata con nuestras vidas a través de esas heridas.

Y con su amor, hace que sanen, para que no queden profundas  huellas de ese gran dolor, que nos puedo haber provocado alguna circunstancia que hemos vivido.

Sabemos que sanaron cuando nacen nuevas expectativas.

 Cuando se asoma en nuestras vidas la esperanza.

Así como Abrahán, que se fortaleció en la fe “dando gracias a Dios”. Creyendo en la promesa que Dios le había dado. Aun en contra de toda circunstancia. Aunque todo parecía  imposible. Pero su fe  fue el detonante para que Dios lo acepte. (v.22)

Ora: Señor, te doy gracias por aceptarme. Dame la fortaleza para creer en tu promesa.

Dame la tranquilidad para esperar en tu tiempo. Y será en tu tiempo,  el tiempo que tú decidiste que sea  mejor para mí.

Rosa Acosta

Periodista – O.P.N